Mejora de los resultados educativos a través del desarrollo del potencial total de los estudiantes
Nuestros centros educativos están comprometidos con el desarrollo del recurso natural más importante de nuestra sociedad: la inteligencia y la creatividad de nuestra juventud. El programa Educación Basada en la Consciencia permite a cualquier centro educativo cumplir con la responsabilidad de desarrollar sistemáticamente la creatividad y la inteligencia latentes en los estudiantes, a fin de que, independientemente de su base educativa o socioeconómica, puedan experimentar éxito y plenitud crecientes cada día. Esto se alcanza a través de tecnologías de la conciencia, efectivas y probadas, especialmente el programa de Meditación Trascendental y el Vuelo Yoguico.
En todo el mundo se esta enseñando la Meditación Trascendental en Colegios e Universidades.
El desarrollo de la consciencia es la clave del aprendizaje
Tradicionalmente, la educación se ha enfocado en aquello que los estudiantes estudian, el aspecto objetivo del conocimiento, sin desarrollar sistemáticamente la base subjetiva del conocimiento, la consciencia del estudiante. Sin embargo, es la calidad de la consciencia de los estudiantes lo que determina su grado de inteligencia, de creatividad, de confianza, de calma interior y motivación, todo ello fundamental para la educación. La investigación científica verifica que estas cualidades se desarrollan directamente con el programa Educación Basada en la Consciencia, el cual aviva el funcionamiento total del cerebro a través de la experiencia del potencial total de nuestra consciencia.
La Educación Basada en la Consciencia utiliza el programa fácil y natural de Meditación Trascendental para desarrollar el potencial total de los estudiantes. Más de 600 estudios de investigación científica realizados en más de 200 universidades e institutos de investigación en 30 países verifican los amplios beneficios de esta técnica para la vida individual y social (ver Investigación). Al desarrollar progresivamente el uso total del cerebro, el programa de Meditación Trascendental refuerza las bases cognitivas, fisiológicas y afectivas del aprendizaje, llevando a hábitos de vida más sanos y a conductas más positivas.
Al mismo tiempo, la práctica regular de esta técnica reduce apreciablemente el estrés y la tensión que muchos estudiantes y profesores experimentan a diario, creando un ambiente de aprendizaje feliz, armonioso y enfocado. El programa de Meditación Trascendental no es una religión, ni una práctica religiosa, y no implica cambios en el estilo de vida ni en las creencias. Más de cinco millones de personas en todo el mundo, de todo origen y cultura, han aprendido esta técnica.